Historia

Analizamos nuestra propia situación como inmigrantes en Austria: como trabajadores en la industria del sexo, como limpiadores de empresas de arrendamiento, como personal de limpieza y enfermería en empresas y hogares privados, como auxiliares de enfermería en el sector de la salud, pero también como inmigrantes ilegales, como asilo buscadores, como desempleados, como amas de casa, como estudiantes, como científicos. Y decidió actuar.

Determinados por circunstancias históricas, comenzamos nuestro trabajo en maíz como una asociación autoorganizada de y para inmigrantes en Linz.

Por un lado, las experiencias y posiciones traídas en la resistencia contra las dictaduras militares en América Latina en las décadas de 1970 y 1980, la implementación de políticas neoliberales, el declive de los estados socialistas a fines de la década de 1990 y el ascenso mundial del neoliberalismo a una posición hegemónica. Por otro lado, la existencia como migrantes en territorio europeo occidental, condiciones de vida y trabajo indignas y la falta de perspectivas y espacios que permitan la acción autoorganizada. Unos años después, en 1994, el levantamiento indígena en Chiapas…. En el mismo año empezamos a organizarnos políticamente como inmigrantes, visibles para el mundo exterior y en el centro de Linz. Se fundó el maíz.

maiz está ubicado en el corazón de una ciudad cuya historia y apariencia fueron moldeadas significativamente por el nacionalsocialismo: Linz. Hasta el día de hoy, las complejas dimensiones de la antigua política de exterminio nacionalsocialista se pueden ver y sentir en la capital de la provincia de Alta Austria. Como migrantes, reclamamos conscientemente este lugar central e histórico para nosotros. Con nuestra presencia lo tomamos como un espacio público de participación y actuamos por estructuras de convivencia igualitarias y autónomas. Luchamos contra las estructuras y la violencia patriarcales y heteronormativas, contra la explotación capitalista, las relaciones desiguales de poder político, contra la exclusión racista, el sexismo y la homofobia. En estos lugares icónicos de la topografía del terror, el campo de acción de los migrantes es empujado, expandido e inventado.

Articulación de resistencia e incorporación poscolonial en el sentido de “antropofagia cultural”. El trabajo del maíz se lleva a cabo por la decisión estratégica de interferir en la producción hegemónica de conocimiento, de luchar por espacios para los migrantes donde no los hay, conscientes del peligro de apropiación y de los conflictos que tal interferencia puede generar. , sobre el enredo en las condiciones sociales y por lo tanto también las contradicciones. Nuestra intención es generar impulsos para cambios, generar cambios y cuestionarnos en el proceso. Queremos descartar y redactar preguntas, preguntas que generen rupturas e irritaciones, que visibilicen paradojas, antagonismos y la necesidad de un cambio de perspectiva. El requisito previo para esto es el desarrollo de nuevas estrategias y utopías. maiz siempre ha perseguido el objetivo de no ser, sino de convertirse.

La ocupación feminista del concepto antropófago por el maíz cambia los contextos: se trata de un desplazamiento de fronteras, de una ocupación espacial emancipadora y, por lo tanto, de la resistencia contra la exotización del "otro". No sólo es relevante la cuestión de qué se está hablando, sino también quién habla en nombre de quién y qué se reconoce como conocimiento legítimo, cuándo y por qué. Para poder realizar un examen fundamental de la actual división internacional del trabajo racista y específica de género y la migración asociada, afirmamos participar en los intentos de descolonización. Consideramos la teoría y la práctica, así como la educación y el poder en su enredo.

 

Sobre la manzana de maíz

(después de Tania Araujo, cofundadora de maiz)

Según la Biblia cristiana, Adán y Eva tuvieron que dejar el paraíso por una "manzana". Aquí la manzana es el símbolo del pecado y la disidencia, es el fruto prohibido del paraíso y representa la inmortalidad, la seducción, el amor y el erotismo.

Nosotros, los inmigrantes, también seremos expulsados ​​del "paraíso" austríaco una y otra vez. Maíz se opone a esto con un análisis político y un trabajo emancipador con mujeres migrantes que se construye a partir del autoempoderamiento y la crítica a las relaciones de poder imperantes. En el simbolismo del maíz, la manzana del conocimiento no solo es de un rosa pecaminoso, sino que también representa un globo cuyo hemisferio norte le damos un buen mordisco.

Apple como metáfora de los conflictos epistemológicos y de poder político

  • En el principio era el paraíso, Adán y Eva y una serpiente sobre un manzano.
  • En el principio era la manzana: la manzana del conocimiento y la manzana del árbol del conocimiento.
  • En el principio era la manzana y se comía.
  • Así comenzó la historia de la humanidad.
  • Adán y Eva tuvieron que dejar el paraíso por una manzana: la manzana del pecado, la manzana como símbolo de la disidencia, la manzana como fruto prohibido del paraíso, la manzana como fruto clásico de la inmortalidad, la seducción, el amor y el erotismo.

La manzana en el simbolismo del maíz.

Al igual que Adán y Eva, los migrantes somos constantemente expulsados ​​del paraíso austríaco -Jardín del Edén- porque, como Eva, podemos seducir y querer comer la manzana del conocimiento mientras está prohibido.

En los inicios de la humanidad hubo conflictos epistemológicos y de poder-políticos: saberes, habilidades, competencias, etc.

Mordemos la manzana madura, con risa antropófaga y poder subversivo en forma de trabajo emancipatorio y político. Mordida en la inconfundible manzana rosada, pecaminosamente mordida manzana rosada, mordida globo, no mordida en alguna parte, mordida en el norte, porque la localización y la localización son momentos indispensables de liberación. Globo mordido como metáfora frente a las geografías imaginarias construidas en el norte. Mordido no de la nada, sino del sur. “El Sur no es solo un espacio físico-geográfico; es una “metáfora del sufrimiento humano”. El Sur es también el lugar privilegiado de la crítica. La mirada del Sur es una “zona epistemológica” que se opone a la del Norte en la “geopolítica del conocimiento”.” (Sousa Santos 2004)

el maíz y la manzana del conocimiento: más allá de las cuestiones y debates teóricos, analíticos y epistemológicos, planteamos un nuevo problema político: el maíz pretende realizar una utopía en un mundo donde no hay utopía. Las utopías tienen sus horarios, dice Ernst Bloch (1985). Y también tenemos horarios, planes de estudios, planes de lecciones e incluso manuales.

Después de escrito::

Al principio estaba la manzana, orgánica y baja en calorías, sin la dictadura de la belleza. Después de eso, la báscula del baño gobernó la vida de Adán y Eva. Y el mismo diablo calculó el peso ideal del pueblo.
Pero ese es otro trabajo...

Autora: Tania Araujo
En: maiz - manual para la enseñanza como proyecto transdisciplinario. Curso preparatorio para el certificado de secundaria externa. 2010